madreselva - Virginia Janza

Bolsillo, 112 páginas, 2024.

Comprar Libro

“Hay una cama, una pared / una construcción de algo abstracto / yo tengo una idea, vos tenés otra / ninguno de los dos tiene idea de qué es”. Algo se intersecta entre el Yo y el Tú: es el intento de una relación (de) pareja. Pero justo en ahí está la incógnita: ¿con qué ideas, expectativas, sueños, llegamos a una relación? ¿es posible armar esa construcción abstracta que se traduce en una vida concreta, cotidiana? Madreselva empieza por el final: en el comienzo la ruptura. Y entonces imprimir sobre la cara del antes Amado, el desconocimiento, la distancia. ¿Cómo se pasa de la con-fusión pasional a la separación de los cuerpos, de los objetos, de los territorios? Madreselva va recorriendo estas preguntas, como ramas que dan flores o no, a veces no germinan, a veces se pudren. En ese entramado hecho de versos musicales, pequeños estribillos como iluminaciones, como plegarias, Virginia Janza va revelando poéticamente una historia que avanza para terminar dibujando un cuerpo de mujer. Después de todo lo pasado con el otro, no es allí dónde residía la incógnita. Es en esta enredadera perfumada, resistente, colorida, que crece con facilidad en cualquier lado (por eso también el peligro, el cuidado) sí, es en la propia madreselva (mezcla de erotismo y maternidad) donde hay que buscar la relación, donde hay que reparar la fisura del Yo con Una misma. Enamorarse, de una vez por todas, de las mujeres que podemos ser: “Voy a hacer un embrujo / no tengo miedo / voy a escribirlo / y a enterrarlo / esta vez / estoy segura / la que se va a enamorar / soy yo”.

Karina Macció

*

Dejame sacarme la piel
no es lo que pensás
no voy a despelarme
hay una capa
muchas
que no ves
son como tules
velos
que me cubren
me protegen
hay mucha gasa que desprender
crepe liviano
yo no sé la danza de la evasión
de la huida
del escape
soy apenas
una chica superficial
que cubre
protege
todo lo que puede
vos seguro no entendés
este desnudo
involuntario
lo que mejor me sale a mí
quedar disimulada
protegida
por una capa de color
de brillo
una capa de piel
o tres o siete
o tantas como puedas
resistir
y así sigo simulando
la forma
límites impresionistas
toda esa aptitud por el movimiento
que conozco tan bien
dejame
sacame la piel
sacame
yo sé que pensás que es tarde
que ya viste todo
pero este baile, cariño
cariño mío
recién comienza entre vos y yo
recién comienza el camino de la dicha
lo que está detrás no está dicho
un jardín oculto
siempre es
una suerte de premio
una aventura por descubrir
una nueva palabra
lo que aún permanece
callado
escondido
bajo la piel

Virginia Janza